¿Sabes esa sensación de cuando llevas semanas, incluso meses, buscando esa ficha del puzzle que se cayó de la mesa y que no encuentras?
¿Y que, sin darte cuenta, la ves y la tienes delante de ti y piensas "Joder, te encontré, ya tengo todo lo que necesitaba"?
Esa sensación la tengo cada vez que te miro o te escucho, siempre, desde la primera vez que hablamos por Skype.
Calmas mi ansiedad, haces que vea el mundo de otra forma, no me importa que me hagan daño, no me duele. Me dolerá cuando te lo hagan a ti, porque por mucha mierda que yo tenga encima, si tú estás bien, yo lo estoy.
Y cuando estés a mi lado, no te ocurrirá nada malo, serás mucho más feliz que ahora, cuidaré de ti.
Si te caes, te levantaré. Te enfadarás cuando meta el dedo en la comida cuando aún la estés preparando. Me abrazarás cada 15 minutos y si tardo en el baño, más de lo normal, me gritarás que me echas de menos para que me apure. Pasaremos domingos procrastinándolo todo, acostada viendo películas. Saldremos a pasear aunque llueva, caminando sin rumbo por La Laguna, disfrutando del frío, abrigadas, saltando todos los charcos. Tanto, que llegaremos empapadas a casa y tendremos que desnudarnos antes de entrar, para ir directas a la ducha. Una ducha de agua caliente en la que, juntas, nos reiremos de todo, besándonos.
¡Y vigilaré que no venga ningún asesino mientras cierras los ojos bajo el agua!
Todo será así.
Esto es todo lo que puedo decirte, seremos felices viviendo juntas, con nuestras locuras y tonterías, con nuestros cabreos estúpidos y reconciliaciones en la cocina, o donde nos pille. Jugaremos con la comida, y haremos guerras de agua, tendremos nuestros concursos de eructos y me verás ahogarme con el cola-cao al meterme una cucharada en la boca. te llenaré la cocina de polvitos de cola.-cao, que lo sepas.
Sólo te diré que eres el amor de mi vida, la chica de mis sueños en la realidad, que te amo. que te esperaré aquí lo que haga falta, hasta que llegues.
Lo eres todo.
Te amo.
